lunes, 12 de julio de 2010

La Iglesia Logra la Liberación de 52 Presos Políticos

El Arzobispado de La Habana anunció la liberación de 5 presos políticos y que las gestiones para liberar a otros 47 concluirán en un periodo de 3 a 4 meses. "Siguiendo la continuidad del proceso antes mencionado (de diálogo entre la Iglesia y el Gobierno comunista), el cardenal Jaime Ortega Alamino fue informado de que otros 6 presos serán trasladados a sus provincias de residencia y que 5 más serán puestos en libertad y podrán salir en breve para España en compañía de sus familiares", explicó en un comunicado.

     Asimismo, las autoridades comunistas indicaron que "los 47 presos que restan de los que fueron detenidos en 2003, serán puestos en libertad y podrán salir del país. Esta gestión será concluida en un periodo de 3 a 4 meses a partir de este momento".

     Este anuncio se dio luego de los encuentros que el arzobispo de La Habana, cardenal Ortega Alamino, sostuvo con el Presidente Raúl Castro, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación de España, Miguel Ángel Moratinos; y el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla.

     Previamente, se indicó, el Purpurado había sostenido una reunión de trabajo conjunta con Moratinos y Rodríguez Parrilla.

     El comunicado señala que el proceso de liberación "ha tomado en consideración las propuestas expresadas previamente al cardenal Ortega por los familiares de los presos".

     Como se recuerda, gracias al diálogo que sostienen las autoridades de la Iglesia con el Gobierno comunista, se había logrado hasta el momento "la liberación de un prisionero y el traslado de otros doce a sus provincias de residencia".


Payá agradece a Iglesia y espera el fin de la injusticia


     El coordinador del Movimiento Cristiano de Liberación (MCL), Oswaldo Payá Sardiñas, agradeció a la Iglesia por sus gestiones para lograr la libertad de los presos políticos y a la vez expresó su deseo de que esto sea el fin de la injusta prisión y que los cubanos puedan acceder a la democracia.


Payá agradeció de manera especial a la Iglesia por estas gestiones y por su acompañamiento solidario, "el consuelo y la asistencia que tantas religiosas, religiosos, laicos, sacerdotes y obispos en toda Cuba brindaron todos estos años y siguen brindando a los prisioneros políticos y a sus familiares".


     "Este debe ser el primer paso para liberar prontamente a todos los presos políticos y para comenzar los cambios que el pueblo quiere. Y cambios significa reconciliación, derechos, libertad. Eso lo podemos lograr entre todos los cubanos", expresó.


     El líder del MCL también agradeció a los cubanos que dentro y fuera de la isla han sido solidarios con los presos políticos, y a los gobiernos e instituciones internacionales y a las "heroicas Damas de Blanco", esposas de quienes fueron encarcelados en 2003 sólo por exigir el respeto a los derechos humanos.


Noticia original: AICA

jueves, 1 de julio de 2010

Saramago Murió; Dios Vive

VER

Ha fallecido José Saramago, de origen portugués, premio Nóbel de Literatura, escritor prolífico y profundo, crítico de los sistemas, comprometido con los marginados, agudo para analizar los fenómenos sociales y políticos, libre para denunciar opresiones, fiel a sus convicciones marxistas. No podemos regatear sus méritos literarios y sociales.

Fue un ateo convencido y beligerante. Atacó acremente a nuestra fe, haciendo una interpretación tendenciosa e históricamente incompleta del cristianismo, de la Iglesia y de la práctica religiosa. Manifestó no tener fe en otra vida con Dios, como la esperamos los creyentes, pues rechazó la misma existencia de un Ser Superior. Esto le trajo dividendos de fama e ingresos económicos, con grandes espacios en medios de la misma tendencia. Ya murió, pero Dios, a quien él negó, no morirá jamás. Mueren famosos literatos, como moriremos todos, pero nuestra fe en un Dios vivo y trascendente nos sostiene en la esperanza. La vida tiene pleno sentido en Él, con Él y por Él.



JUZGAR

¿A qué se debe el ateísmo? ¿Cuáles son sus raíces y sus diversas manifestaciones?

Al respecto, dijo el Concilio Vaticano II desde 1965: "La palabra ‘ateísmo' designa realidades muy diversas. Unos niegan a Dios expresamente. Otros afirman que nada puede decirse acerca de Dios. Los hay que someten la cuestión teológica a un análisis metodológico tal, que consideran como inútil el propio planteamiento de la cuestión. Muchos, rebasando indebidamente los límites de las ciencias positivas, pretenden explicarlo todo sobre esta base puramente científica, o por el contrario, rechazan sin excepción toda verdad absoluta. Hay quienes exaltan tanto al hombre, que dejan sin contenido la fe en Dios, ya que les interesa más, a lo que parece, la afirmación del hombre que la negación de Dios. 

Hay quienes se imaginan un Dios por ellos rechazado, que nada tiene que ver con el Dios del Evangelio. Otros ni siquiera se plantean la cuestión de la existencia de Dios, porque, al parecer, no sienten inquietud religiosa alguna y no perciben el motivo de preocuparse por el hecho religioso. Además, el ateísmo nace a veces como violenta protesta contra la existencia del mal en el mundo, o como adjudicación indebida del carácter absoluto de ciertos bienes humanos que son considerados prácticamente como sucedáneos de Dios.

Quienes voluntariamente pretenden apartar de su corazón a Dios y soslayar las cuestiones religiosas, desoyen el dictado de su conciencia y, por tanto, no carecen de culpa. Sin embargo, también los creyentes tienen en esto su parte de responsabilidad. Porque el ateísmo, considerado en su total integridad, no es un fenómeno originario, sino un fenómeno derivado de varias causas, entre las cuales se debe contar también la reacción crítica contra las religiones y, ciertamente en algunas zonas del mundo, contra la religión cristiana. Por lo cual, en esta génesis del ateísmo, pueden tener parte no pequeña los propios creyentes, en cuanto que, con el descuido de la educación religiosa, o con la exposición inadecuada de la doctrina, o incluso con los defectos de su vida religiosa, moral o social, han ocultado, más bien que revelado, el genuino rostro de Dios y de la religión" (GS 19).

ACTUAR

Afirma el Concilio: "El remedio del ateísmo hay que buscarlo en la exposición adecuada de la doctrina y en la integridad de vida de la Iglesia y de sus miembros. A la Iglesia toca hacer presentes y como visibles a Dios Padre y a su Hijo encarnado en la continua renovación y purificación propias bajo la guía del Espíritu Santo. Esto se logra principalmente con el testimonio de una fe viva y adulta y el amor fraterno" (GS 21). "En realidad, el misterio del hombre sólo se esclarece en el misterio del Verbo encarnado" (GS 22).

Respetemos a los no creyentes, pero que éstos también nos respeten a nosotros. La mejor forma de contrarrestar el ateísmo es cimentando nuestra fe en la Palabra de Dios y en la doctrina de la Iglesia, y sobre todo con nuestra coherencia de vida en la justicia, la verdad, la honestidad, el servicio fraterno, la opción por los pobres.

Monseñor Felipe Arizmendi Esquivel
Obispo de San Cristóbal de Las Casas (México)
26 de junio de 2010

Milagro Eucarístico de Siena: Entrevista a Fray Spring

El sacerdote franciscano Paolo Spring tiene desde 1997 una misión que está plenamente relacionada con su vocación: cuidar el milagro eucarístico que se encuentra en la basílica San Francisco de la ciudad de Siena, ubicada en la región de la Toscana, al norte de Italia. 
Semanalmente recibe decenas de grupos de peregrinos, desde niños que se preparan para su primera comunión, hasta extranjeros que aprovechan su viaje a esta ciudad llena de arte, historia y espiritualidad, para ver uno de los milagros eucarísticos más impresionantes: el de 223 hostias consagradas hace 280 años que hasta ahora se encuentran intactas en una de las capillas laterales de la basílica.

Hostias preservadas (imagen: Corazones.org)




Al acoger a los fieles, el padre les cuenta la historia del milagro en ingles o italiano, y él mismo, al narrarla, se maravilla frente a este hecho, como si fuese la primera vez que escuchara la historia.

“Vienen de todo el mundo, donde hay católicos. Vienen para ver el milagro. Cuando llegan, cantan, se conmueven y lloran de alegría”.

Una alegría que contagia y renueva al mismo sacerdote, pese a que conoce la historia hace mucho tiempo. Aún recuerda la primera vez que vio estas hostias: “A finales de los años 70 en una peregrinación cuando vine aquí conocí el milagro hasta el fondo y pensé: Debe estar bien custodiado, debe darse a conocer, debemos trabajar para que, quien viene lo entienda y se vaya con este milagro en su corazón”.


Milagro diario

Era el año 1730. El 14 de agosto, vísperas de la fiesta de la asunción de la Virgen María, en todas las iglesias de Siena los sacerdotes consagraron hostias adicionales para quien quisiera recibir el cuerpo de Cristo al día siguiente.

Por la noche todos los sacerdotes de Siena se reunieron en la catedral principal de esta ciudad para hacer una vigilia y dejaron solas sus respectivas iglesias. Unos ladrones aprovecharon y entraron en la basílica de San Francisco para robarse el copón de oro con las hostias consagradas.

A la mañana siguiente se dieron cuenta de que las hostias no estaban y en medio de la calle, un feligrés encontró la parte de arriba del copón. Quedó así comprobado que se había robado el cuerpo de Cristo. Los habitantes de Siena comenzaron a orar para que aparecieran las hostias.

Tres días después, mientras un hombre estaba orando en la iglesia de Santa María en Provenzano, muy cerca de la Basílica de San Francisco, notó que había algo de color blanco dentro de una caja destinada para la donación a los pobres. Inmediatamente informaron al arzobispo y llegaron para ver de qué se trataba.

Abrieron la caja, eran las 351 hostias consagradas – el mismo número de hostias que fueron robadas. “Esos tres días fueron como los días entre la Crucifixión y la Resurrección”, asegura el padre Spring. Estaban llenas de polvo y telarañas. Los sacerdotes las limpiaron con sumo cuidado.

Luego hubo una jornada de adoración y reparación. Miles de fieles llegaron a la basílica para agradecer el hallazgo de las hostias. Estas no fueron distribuidas, al parecer, porque los franciscanos querían que los peregrinos las adoraran hasta el momento en que se deterioraran (porque al deteriorarse, desaparece la presencia real de Cristo).

Pero las hostias permanecían intactas y con un olor muy agradable. La gente empezó a considerarlas como milagrosas y cada vez iban más peregrinos a orar ante ellas. Algunas pocas fueron distribuidas en ocasiones especiales.

Hoy, 280 años después, permanecen 223 hostias que presentan el mismo estado que tenían el día que fueron consagradas. “En diversas etapas estas han sido examinadas y físicamente conservan todas las características de una hostia recién hecha”, aclara el padre Paolo.

En 1914 se hizo la examinación más rigurosa de este milagro por disposición del papa san Pío X, “las Sagradas Partículas resultaron en perfecto estado de consistencia, lúcidas, blancas, perfumadas e intactas” dijo el padre Spring.

También se concluyó en esta examinación que las hostias robadas fueron preparadas sin precauciones científicas y guardadas bajo condiciones ordinarias que, en circunstancias normales debieron haber causado un rápido deterioro.

El 14 de septiembre, de 1980, el papa Juan Pablo II viajó a Siena para celebrar los 250 años de este Milagro Eucarístico. Al ir dijo: “es la Presencia”. También han ido a orar ante estas santas hostias, personajes como san Juan Bosco y el beato papa Juan XXIII


Para el padre Spring, el Milagro Eucarístico de Siena “representa una prueba del amor de Dios hacia nosotros y la presencia para sostenernos contra las dudas, las dificultades, el milagro con el cual Dios padre está ayudando a la Iglesia a no tener miedo, a vivir la presencia de su fundador enviado por el Padre para hacer su voluntad”.


“Aquí suceden dos cosas milagrosas”, explica el padre Spring señalando las hostias consagradas hace casi tres siglos. “El tiempo no existe, se ha detenido”, y el sacerdote explica el segundo milagro:” “Los cuerpos compuestos y las sustancias orgánicas están sujetas a marchitarse. Para estas hostias, ni los hongos, ni los elementos que las descomponen subsisten. Es un milagro viviente, continuo, no sabemos hasta cuándo el Señor lo permitirá” concluye el sacerdote.

Traducción de Carmen Elena Villa para Zenit.org
Siena (Italia), 22 de marzo de 2010

Catástrofe Ecológica en el Golfo de México

La catástrofe ecológica provocada por la marea negra en el Golfo de México debe ser una lección de humildad para todas las actividades humanas, no sólo en el campo de la producción de energía, aseguró el portavoz vaticano.
 
El padre Federico Lombardi, Director de la Oficina de Información de la Santa Sede, ha analizado estos dos meses de pérdida de petróleo en las aguas del Golfo de México a causa de la explosción de una plataforma de la compañía petrolera BP. 

"Las dimensiones del desastre son difícilmente calculables, pero son ciertamente enormes y siguen extendiéndose", reconoce el portavoz vaticano en el último editorial de "Otava Dies", semanario producido por el Centro Televisivo Vaticano del que también es director. 



Esta catástrofe, añade, recuerda a otros graves desastres ambientales relacionados con las actividades humanas como el de la fábrica química de Bhopal en India, en 1984, o el desastre de la central nuclear de Chernóbil, en Ucrania, en 1986, que no solo causaron catástrofes ecológicas sino que también acabaron con vidas humanas.

"Lo que sorprende en este caso es el sentido de impotencia y el retraso en la búsqueda de una solución frente al desastre por parte de una de las multinacionales petroleras más grandes y técnicamente mejor equipadas del mundo, así como también por parte del país más potente de la tierra", reconoce el padre Lombardi.
 
"Esto resulta increíble, pero es un hecho --subraya--. No se trata de una erupción de un volcán, sino de un hueco relativamente pequeño hecho por el hombre en el fondo del mar. Y sin embargo, en dos meses científicos y técnicos extraordinariamente especializados no han logrado taparlo".

El padre Lombardi en su editorial plantea esta pregunta: "¿Sabremos sacar una lección de prudencia y atención en el uso de los recursos de la tierra y de los equilibrios del planeta?".
"Ciertamente a partir de ahora cambiará mucho en el campo de la extracción petrolera para que sea más segura -reconoce--. Pero quizá podemos sacar también una lección de humildad. La técnica siempre hará progresos. Pero si en procesos productivos relativamente simples se manifiesta tan impotente, ¿qué haremos si se nos escapan de las manos procesos mucho más complejos como los que tienen que ver con la energía custodiada en el núcleo de la materia o más aún, en los procesos de la formación de la vida?".

El padre Lombardi concluye reconociendo que tenía razón Benedicto XVI cuando al terminar su última encíclica sobre los grandes problemas de la humanidad de hoy, Caritas in veritate, consagra un capitulo "sobre la responsabilidad en el uso del poder de la técnica".

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Federico Lombardi
Director de la Oficina de Información de la Santa Sede
20 de junio de 2010
 

Iglesia, Estado, Separación y Colaboración

Eminencia,Excelentísimos Señores Obispos,
Distinguidas Autoridades civiles,
Estimadísimos miembros del Cuerpo Diplomático, Consular y de las Organizaciones Internacionales,
Queridos sacerdotes, diáconos, religiosos y religiosas,
Hermanos y hermanas en el Señor:

Es con inmenso gusto y placer que me encuentro aquí esta noche, huésped del Eminentísimo Cardenal Ortega y Alamino, en esta bella Iglesia Catedral, casa de Dios, lugar de recogimiento y oración para todos los fieles habaneros. Siento el deber de agradecer a la Conferencia de los Obispos Católicos de Cuba la invitación que me ha hecho, junto con el Gobierno nacional, para visitar esta hermosa Isla con ocasión de la celebración de algunos eventos,

¿Estamos Seguros de Nuestra Fe?

Para saber

No es raro que en las conversaciones surja el tema de la religión o sobre Dios. No faltan ideas novedosas que nos sorprenden porque niegan o ponen en duda lo que la Iglesia enseña. ¿Qué hacer en estos casos? Una pregunta semejante se la hicieron recientemente al Papa.