El
4 de septiembre de 2013 en declaraciones al blog Stanze Vaticane, del canal de
televisión italiano Tgcom24, el padre Gabrielle Amorth ya había advertido que:«Estos que quieren la guerra
en Siria son instrumentos del diablo»...«El Señor es un Dios de paz, quiere la
paz, quiere el amor entre los hombres, quiere la solidaridad y la ayuda, de
modo que el rico ayude al pobre. Y Satanás es quien quiere la muerte y la
guerra».
Pero
ahora el exorcista de la Diócesis de Roma ya no sólo los acusa de ser un
«instrumento» de maldad. Es aún más radical. «El Califato es Satanás» afirma el padre Amorth.
Para
argumentar esta certeza con la cual, dijo, busca motivar a la acción espiritual
del clero y feligreses católicos, comentó a Il Giorno:
"Las
cosas suceden primero en la esfera espiritual, luego deviene su concreción en
esta tierra. En el reino espiritual están sólo dos. El Espíritu Santo y el
espíritu demoníaco. Aunque el mal se enmascare en diversos ámbitos… político,
religioso, cultural, tiene una sola fuente que le inspira, el diablo. Como
cristiano, combatimos a la bestia espiritualmente. Pero la política mundial que
hoy parece carente de respuestas frente a la masacre de los cristianos deberá
combatir al ISIS y lo hará de una manera diferente."
aunque cuestiona la acción de Occidente que en los últimos
decenios ha renegado de su identidad cristiana «enviando todo por la borda», luego el exorcista señala –dando un signo de esperanza- que es el propio demonio quien acusa su
derrota: «Él
responde cuando lo interpelo. Repite que el mundo está en su poder, y aquí dice
la verdad. Bíblicamente hablando, estamos en los últimos tiempos y la bestia
está trabajando frenéticamente...